El Ayuntamiento de Ibiza ha activado un protocolo de prevención y ha pedido máxima cautela ante la nueva alerta naranja prevista para mañana jueves, generada por la llegada de una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que ha sido denominada Alice. Esta amenaza meteorológica golpea la isla mientras se cuantifican las pérdidas de la catástrofe de la semana pasada, las cuales, solo en términos de infraestructura pública, superan ya los 3.200.000 euros.
El alcalde de Ibiza, Rafael Triguero, ha realizado en diálogo con Radio Ibiza un balance de la intensa semana de trabajo y ha urgido a los vecinos a la precaución. La ciudad se enfrenta a esta nueva prueba con la conciencia de su vulnerabilidad, pues el alcalde ha recordado que el 65% del desarrollo urbano en la ciudad de Ibiza se encuentra en una zona inundable.
La catástrofe económica
El primer informe oficial sobre los daños económicos de las inundaciones anteriores revela que la afectación a equipamientos, infraestructuras y mobiliario urbano de competencia municipal supera los 3.200.000 euros.
Sin embargo, esta cifra inicial no refleja el alcance total de la catástrofe. El balance económico final será significativamente mayor, ya que aún no se han valorado las pérdidas sufridas por particulares, comerciantes y locales comerciales. Además de vecinos, comunidades de propietarios, aparcamientos soterrados y entresuelos.
El daño generalizado se considera «importante», según Triguero, que afirmó que todavía existen puntos críticos que no han vuelto a la normalidad. Por ejemplo, hay edificios que siguen dependiendo de un grupo electrógeno para obtener suministro eléctrico, y el colector o tanque de tormentas del puerto todavía no está conectado al suministro eléctrico.
Ayudas y obras
Además de solicitar la máxima celeridad al Gobierno del Estado para las ayudas, el Ayuntamiento está diseñando sus propias bases de subvenciones municipales que buscan ser «ágiles y efectivas», dirigidas a locales comerciales, comerciantes y propietarios de viviendas con edificaciones dañadas.
Los afectados podrán acceder a estas ayudas con una simple justificación cuantificando los daños, respaldada por imágenes y una declaración responsable firmada, evitando así trámites complejos. El montante final de estas ayudas municipales se espera definir en cuestión de «horas, días», adelantó Triguero.
El alcalde ha enfatizado que la alta vulnerabilidad de la ciudad (65% inundable y con muchas carencias hídricas) exige un gran desarrollo hídrico. Se cometerán inversiones inmediatas para reconducir los viales de evacuación en puntos críticos como el edificio de Brisol y la calle Joan Castelló. Si bien la canalización de una gran red de pluviales será un trabajo a largo plazo.
Activación de alerta naranja y suspensiones inmediatas
La activación de la alerta naranja llevó a la celebración de un comité técnico de Meteobal esta mañana, seguido de una reunión interna en el Ayuntamiento con servicios municipales como la Policía Local y Protección Civil para coordinar posibles acciones.
El protocolo preventivo establecido implica la suspensión de todas las actividades al aire libre a partir de la activación de la alerta. Las siguientes instalaciones y actividades permanecerán cerradas o con sus actividades exteriores suspendidas:
- Instalaciones deportivas.
- Locales de asociaciones vecinales.
- Parques infantiles.
- Actividades en el exterior de los centros sociales.
Respecto a la asistencia escolar, el alcalde aclaró que, siguiendo el protocolo técnico para una alerta naranja, no es necesario que los niños dejen de asistir a su centro escolar.
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