El tiempo cambia en Baleares. Tras varios días de temperaturas anormalmente altas para comienzos de noviembre, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha confirmado la llegada de un frente frío que traerá lluvias, tormentas y un descenso térmico en todas las islas a partir del jueves.
Según ha explicado el portavoz de Aemet en Baleares, Miquel Gili, el frente se desplazará rápidamente, pero será suficiente para romper la estabilidad de las últimas jornadas y devolver los termómetros a valores más propios del otoño.
Una semana que arranca con temperaturas inusualmente altas
El inicio de la semana se caracterizará por un ambiente tranquilo y temperaturas más altas de lo habitual para estas fechas. Este lunes el cielo se mantendrá poco nuboso en Ibiza y Formentera, mientras que en Menorca y el norte de Mallorca podrían darse algunas nubes y lluvias ocasionales.
Las temperaturas descenderán ligeramente respecto al domingo, aunque seguirán por encima de lo normal para la primera semana de noviembre, con máximas de entre 20 y 23 grados. El viento soplará de componente norte, con intensidad floja o moderada, sin provocar cambios significativos en la sensación térmica.
Para el martes, el cielo continuará mayormente despejado, con viento del sur flojo, que podría ganar algo de intensidad por la tarde. Las temperaturas se mantendrán estables, con mínimas de entre 9 y 15 grados y máximas de 20 a 24 grados.
El miércoles persistirá la estabilidad atmosférica, con pocas nubes y un nuevo ligero ascenso de las temperaturas, que podrían aumentar entre uno y dos grados respecto al día anterior. El viento soplará flojo del sur o sureste, manteniendo un ambiente templado que anticipará el cambio que llegará al día siguiente.
El jueves llega el frente frío: lluvias y tormentas en varias islas
El cambio de tiempo se materializará el jueves, cuando un frente frío atlántico alcanzará las islas y provocará un aumento generalizado de la nubosidad y probabilidad de lluvias acompañadas de tormentas. Según Gili, el frente afectará primero a las Pitiusas (Ibiza y Formentera) y posteriormente al resto del archipiélago.
“Se prevé que la intensidad de las precipitaciones sea moderada y que no acumule grandes cantidades, entre 30 y 40 litros por metro cuadrado como máximo”, ha detallado el portavoz de Aemet.
Durante la tarde, el viento cambiará de dirección y soplará con más fuerza. Pasará a ser moderado con rachas puntualmente fuertes, especialmente en Ibiza, Formentera y el sur de Mallorca, lo que podría dificultar la navegación y provocar alteraciones en el tráfico marítimo.
Las temperaturas nocturnas bajarán, situándose entre 10 y 15 grados, mientras que las máximas no superarán los 22 grados. Este descenso marcará el final del episodio de calor inusual que ha acompañado a Baleares durante los últimos días.
Viernes: el frente se aleja, pero continuará la inestabilidad
El frente frío pasará rápidamente, aunque sus efectos se dejarán sentir durante el viernes, jornada en la que continuará cierta inestabilidad atmosférica, especialmente en el norte de Mallorca y en Menorca, donde podrían darse chubascos aislados al inicio del día.
En las Pitiusas, el cielo se mantendrá nuboso, con posibilidad de algunas precipitaciones débiles. La principal novedad será el cambio del viento, que girará a componente norte y noreste, provocando una bajada adicional de las temperaturas.
Las mínimas oscilarán entre 8 y 15 grados, mientras que las máximas se moverán entre los 18 y 22 grados. Según Gili, con este cambio los valores térmicos volverán a situarse en los rangos habituales para esta época del año, tras un arranque de noviembre marcado por el calor. Con el paso del frente frío por las Islas, se espera que las temperaturas registren valores normales para el mes de noviembre, ha indicado el portavoz de la Aemet.
Temperaturas más acordes al otoño
El paso del frente frío traerá consigo un respiro térmico, especialmente tras los registros inusuales de los últimos días. Este lunes, algunas estaciones meteorológicas de Mallorca y Menorca alcanzaron máximas superiores a los 25 grados, valores más propios de mediados de septiembre.
A partir del jueves, la masa de aire frío que acompañará al frente devolverá la sensación otoñal, con mínimas que podrían situarse por debajo de los 10 grados en el interior de Mallorca y máximas que apenas superarán los 20.
Los modelos meteorológicos apuntan a que la estabilidad regresará de forma progresiva durante el fin de semana, aunque las temperaturas no volverán a los niveles de principios de semana.
Un otoño de contrastes
Este episodio se suma a un otoño atípico en Baleares, caracterizado por periodos de calor anómalo seguidos de cambios bruscos de tiempo. Desde la Aemet recuerdan que este tipo de transiciones son habituales en el Mediterráneo durante los meses de octubre y noviembre, especialmente cuando irrumpen masas de aire frío en contraste con las aguas aún cálidas del mar.
Además, los meteorólogos advierten de que el patrón de lluvias irregulares y temperaturas elevadas continuará siendo frecuente debido al impacto del cambio climático.
En cualquier caso, las lluvias que llegarán a partir del jueves serán bienvenidas para el campo balear, que arrastra un déficit hídrico tras varios meses de precipitaciones escasas.
Así será el fin de semana
De cara al sábado y domingo, los pronósticos indican una mejora del tiempo. Se espera menos nubosidad y un ligero aumento de las temperaturas diurnas, aunque las noches seguirán siendo frescas. El viento del norte tenderá a aflojar, y el ambiente será estable, típico del otoño mediterráneo tras el paso de un frente.
El cambio de tiempo no será intenso ni duradero, pero sí marcará el inicio de una nueva fase meteorológica más acorde a noviembre. Tras varios días de calor casi veraniego, Baleares volverá por fin al otoño.
