El Consell de Govern ha aprobado este viernes la renovación del concierto del servicio de curatela y apoyo a personas adultas por un importe global de 9,4 millones de euros para el periodo 2026-2029, una decisión que refuerza de forma directa la atención a personas con discapacidad en Ibiza, donde se mantienen 77 plazas. La medida, anunciada por el portavoz del Ejecutivo, Antoni Costa, supone un paso clave para asegurar la continuidad de un servicio que garantiza el ejercicio de la capacidad jurídica de usuarios especialmente vulnerables y que exige una estructura sociojurídica compleja.
El acuerdo distribuye 7,13 millones para la Fundación Aldaba y 2,27 millones para la Fundación Tutelar Demà, que gestionan 550 plazas en Baleares, de las que la Pitiusa mayor concentra una parte relevante. Esta renovación incorpora además la actualización de tarifas aprobada en julio, que reconoció el coste diferencial de operar en Ibiza. Así, el precio mensual de una plaza de nivel intenso pasará de 421,89 euros en 2025 a 471,71 euros en Ibiza, y llegará a 499,98 euros en 2027, un incremento que las patronales del sector venían reclamando para garantizar la sostenibilidad del servicio.
Contexto de la medida
La decisión del Govern aterriza en un momento en el que la isla arrastra desajustes estructurales en materia de discapacidad, como el impacto del encarecimiento de la vivienda sobre entidades sociales y profesionales. También llega tras anunciarse avances en la reducción de las listas de espera para la valoración de discapacidad, un problema que ha lastrado durante años el acceso a recursos y que afecta de forma singular a las Pitiusas, donde el tiempo medio para obtener un dictamen ha llegado a superar ampliamente el de Mallorca y Menorca.
En este contexto, la renovación del concierto supone una garantía de estabilidad para las entidades que trabajan en la isla con personas tuteladas o con medidas de apoyo judicial. El Govern destaca que se trata de un refuerzo “decisivo” para dignificar las condiciones laborales del personal que atiende estos casos y para asegurar que los usuarios reciben un acompañamiento jurídico, económico y social “de calidad”, un elemento especialmente relevante en territorios tensionados por la rotación de profesionales y los costes de alojamiento.
Cómo funciona la curatela
El servicio de curatela atiende a personas adultas que requieren apoyo para la gestión patrimonial, la protección de sus derechos y la toma de decisiones en ámbitos esenciales de su vida, siempre bajo resolución judicial. En Ibiza, donde la demanda ha crecido en paralelo a la complejidad de los casos, las entidades alertaban de la necesidad de una financiación estable que evitara interrupciones o limitaciones de los recursos disponibles.
La actualización del concierto hasta 2029 garantiza así la continuidad del servicio en la isla, alineándolo con otras mejoras aplicadas en los últimos meses en el ámbito de la dependencia, como las actualizaciones de tarifas residenciales o el refuerzo de equipos técnicos insulares, recogidas en informaciones previas de este medio.
