La Conselleria de Hacienda del Govern balear no quiere proyectos en los presupuestos que no puedan ser licitados y empezara ejecutarse dentro del ejercicio presupuestario. Este es el criterio principal que ha seguido para elaborar el proyecto de los presupuestos cuya tramitación parlamentaria se retrasó a causa de la negativa de Vox a apoyar el techo de gasto sin acuerdo sobre la libre elección de lengua.
Así lo ha asegurado a La Voz de Ibiza, el vicepresidente Toni Costa, para quien «no tiene sentido incluir en los presupuestos ideas o powerpoints porque sabes que eso no va a poder ser licitado durante el ejercicio presupuestario y estás dejando sin financiación otros proyectos que en cambio sí podrían tirar hacia adelante. Estas decisiones tienen un coste de oportunidad».
Este criterio se aplicará de forma retroactiva en algunos casos. Y es que la Conselleria de Turismo está revisando los proyectos que recibieron financiación a cargo del Impuesto de Turismo Sostenible a finales del año pasado y que tampoco van a poder ser iniciados en 2024. El Govern aspira a recuperar 50 millones de euros para destinar a proyectos «realistas y viables».
Reprogramación
De momento, los 30 millones de euros destinados a llevar el tren desde Manacor a Artà y los 12 para la facultad de Ciencias de la UIB serán reprogramados, junto a otros proyectos que está siendo revisados por los técnicos de Turismo.
El trabajo se limitará a proyectos del año pasado. El Govern no quiere abrir un conflicto con ayuntamientos y consells revisando los proyectos que se encuentran en la misma situación que los relatados, a pesar de amplio margen que hay para reprogramar proyectos, ya que «el 50% de la recaudación de la ecotasa no se ha gastado», asegura Costa.
200 millones de euros
La revisión, por lo tanto, permitiría una reasignación millonaria. Teniendo en cuenta la recaudación acumulada desde 2017, el colchón financiero que podría aflorar podría superar los 200 millones con facilidad.
El criterio también será aplicado para el factor de insularidad y el fondo finalista creado con la recaudación del canon del agua.
El hecho de priorizar los proyectos cuya ejecución pueda iniciarse en 2024, lo que supone que han de tener el proyecto de ejecución listo o a punto a finalizarse, para poder licitar, adjudicar y comenzar las obras, también elimina riesgo de perder fondos Next Generation asignados y que tienen plazos de ejecución muy próximos.
Costa advierte que la reasignación no significa perder la inversión comprometida, si no que ésta será presupuestada en el ejercicio en el que en realidad vayan a empezar las obras.