La gran novedad de la noche electoral del domingo Se Acabó la Fiesta (SALF), la agrupación de electores promovida por Alvise Pérez que es calificada de ultra derecha y es autodefinida como anticorrupción, antisistema y liberal, habría obtenido un conseller si las elecciones se hubieran celebrado al Consell de Ibiza con idénticos resultados.
Extrapolar resultados de unas elecciones a otras tiene un valor limitado, ya que los momentos políticos no pueden compararse, ni la movilización del electorado ni tampoco sus motivaciones. En cualquier caso, todos los partidos lo hacen y, en algunos casos, utilizan la comparativa para reforzar sus argumentarios cuando así les interesa.
Dos consellers menos
Según ha calculado La Voz de Ibiza, el Partido Popular, el gran vencedor de la jornada, perdería la holgada mayoría absoluta de ocho consellers de la que disfruta en la actualidad, y se quedaría solo con seis, un 38,78% de los votos frente a 53% de hace un año.
Este resultado le obligaría a gobernar en solitario o bien a pactar con Vox o con Se Acabó la Fiesta o con los dos. Y es que ambas formaciones a su derecha obtienen representación. Por lo tanto, el bloque de la derecha habría obtenido ocho consellers, uno menos que en la actualidad, ya que el PP cuenta con ocho y VOX, uno.
PSOE sube
El PSOE habría obtenido un gran resultado sumando dos consellers más al pasar de tres a cinco, fruto de pasar del 24,76% de los votos del año pasado al 30,23%, lo que evidencia la debilidad en Ibiza de la formación liderada por Josep Marí Ribas Agustinet, ya que unos malos resultados del PSOE en clave nacional mejoran notablemente los resultados locales de hace un año.
Sería, no obstante, una subida irrelevante, ya que el PSOE no tendría ningún opción de gobernar, salvo pacto imposible con VOX y SALF.
Adiós a UP
Unidas Podemos, sexta opción para los ibicencos que fueron a votar el domingo, no alcanza el umbral del 5% y se queda sin representación. Tampoco le llega a Sumar, la facción escindida de los podemitas, formación que es la quinta opción política con 1.416 votos y un 4,32% de los votos, insuficiente para entrar en el Consell.
La escisión es la causa de la debacle, ya que la suma de los votos de ambas formaciones sí habría sido suficiente para obtener representación en el Consell de Ibiza, con un 7,71% de los votos. El hipotético conseller de UP-Sumar sería a costa del PSOE que se quedaría con cuatro, de forma que los bloques no sufrirían cambios.
Dos de Vox
De los resultados del domingo, se deduce, asimismo, que Se Acabó la Fiesta le hubiera robado un conseller a Vox, ya que la suma de los votos obtenidos por ambas formaciones habría puesto que la formación conservadora se alzara con dos consellers.
Sumar los votos de formaciones distintas es un ejercicio de alto riesgo aunque las formaciones compitan en el mismo espectro ideológico, ya que no está escrito en ningún lado que los votantes de Se Acabó la Fiesta hubieran acudido a votar el domingo y hubieran votado a Vox de no existir la nueva oferta. De hecho, politólogos han identificado que muchos de los votos de Se Acabó la Fiesta provienen de la abstención, si bien la mayoría son votos arrebatados a Vox y al PP.
Un análisis publicado por El Español desvela que Se Acabó la Fiesta robó casi 300.000 votos a Vox, 230.000 al Partido Popular y casi 70.000 al PSOE y arañó 115.000 apoyos de la abstención.
El siguiente del PP
En todos los casos calculados, el Partido Popular es la formación que está más próxima a obtener representación, salvo en el caso de la suma de Sumar y UP, en el que es el PSOE el que está más próximo a obtener representación.
