Una silueta plateada, imponente y perfectamente pulida domina desde hace días el paisaje del puerto de Ibiza. Se trata del Panthera, un superyate de 45 millones de euros que ha captado la atención de residentes, turistas y amantes de la navegación de alto nivel. Con su perfil aerodinámico y sus acabados de alta gama, esta joya flotante se ha convertido en el yate más fotografiado de la temporada.
Construido por el prestigioso astillero italiano Benetti, el Panthera es un modelo custom de 47 metros de eslora, fabricado en aluminio y diseñado para ofrecer un equilibrio entre potencia, velocidad y estilo. Pero si hay algo que realmente distingue a esta embarcación de otras que surcan las aguas pitiusas es su interior: una obra de arte concebida por la firma Armani Casa.
Un interior firmado por Armani Casa
Lejos del diseño náutico convencional, el interior del Panthera ha sido transformado en un espacio sobrio, minimalista y extraordinariamente elegante. Tapizados en tonos piedra, suelos oscuros, iluminación indirecta y mobiliario de B&B Italia configuran un ambiente de lujo silencioso y refinado.
A lo largo de sus cuatro cubiertas, el yate incluye una colección curada de obras de arte contemporáneo y fotografías en blanco y negro de los años dorados del cine, que aportan un aire nostálgico y cinematográfico. Cada estancia ha sido personalizada hasta el último detalle, convirtiendo el Panthera en una galería privada sobre el mar.
La embarcación dispone de cinco camarotes de lujo, incluyendo una suite principal con vestidor, despacho y baño privado, dos habitaciones VIP y otras dos para invitados. Los cuartos de baño están revestidos con mosaicos de la reconocida firma italiana Bisazza, integrando textura y color con una elegancia atemporal.
Tecnología y potencia al servicio del lujo
En lo técnico, el Panthera no se queda atrás. Equipado con dos motores MTU 16V 4000 M73L, alcanza velocidades que rozan los 24 nudos, una cifra notable para una embarcación de estas dimensiones. Con una capacidad de combustible de 61.500 litros, llenar su depósito puede superar los 130.000 euros, una cifra que lo coloca en la élite del gasto náutico.
La experiencia a bordo también incluye jacuzzi con vistas al mar, solárium, comedor exterior panorámico, gimnasio, cine privado y un garaje repleto de juguetes náuticos: motos de agua, seabobs, paddle surf y una embarcación auxiliar para recorrer las calas más recónditas de Ibiza y Formentera.
Ibiza, capital flotante del lujo mediterráneo
La llegada del Panthera no es casualidad. Ibiza se ha consolidado en los últimos años como uno de los principales destinos de navegación de alta gama en Europa. Su puerto deportivo es ya una referencia en el circuito internacional de yates, donde cada verano se exhiben embarcaciones de magnates, celebrities y aristócratas del mundo entero.
El atractivo de la isla va más allá de sus aguas cristalinas. La mezcla única de gastronomía de autor, ocio nocturno, discreción y belleza natural convierte a Ibiza en el lugar perfecto para quienes buscan privacidad sin renunciar al estilo de vida más exclusivo.
Un motor económico para la isla
Más allá del espectáculo visual, embarcaciones como el Panthera generan un impacto económico directo. Desde el empleo de tripulaciones completas hasta servicios de mantenimiento, catering, limpieza o logística, la llegada de estos gigantes del mar alimenta toda una industria local especializada en atender a los clientes más exigentes del planeta.
La industria náutica ibicenca ha sabido posicionarse como referente en servicios premium, acompañando el crecimiento del turismo de lujo con una oferta sólida, profesional y cada vez más sostenible.
Con su estética refinada, prestaciones técnicas de alta gama e interiores diseñados por una de las marcas más icónicas del diseño italiano, el Panthera no es solo un yate. Es una declaración flotante de estilo, poder y sofisticación. Y, por ahora, es también la estrella indiscutible del verano ibicenco.
