La Guardia Civil ha levantado ocho actas por fondeos ilegales en el entorno natural de s’Estany des Peix, en la isla de Formentera, tras una inspección realizada en los últimos días para controlar la presión sobre este enclave de alto valor ecológico.
Durante la intervención, los agentes llevaron a cabo una revisión exhaustiva de las embarcaciones fondeadas sin autorización, una práctica que pone en riesgo especies marinas protegidas como la posidonia oceánica, fundamental para el equilibrio del ecosistema litoral balear.
“El fondeo no autorizado puede ocasionar graves daños en los fondos marinos”, ha advertido el Instituto Armado en un comunicado.
Estas actuaciones forman parte de un plan de protección del entorno marino, desarrollado en coordinación con el Consell de Formentera y otros organismos locales, con el objetivo de reforzar la vigilancia medioambiental y garantizar un uso sostenible del litoral.
Por qué se trata de una zona clave
La Guardia Civil ha recordado que s’Estany des Peix es un enclave especialmente sensible, tanto por su biodiversidad como por la presión humana que soporta durante los meses de verano. Por ello, se han intensificado las labores de control sobre embarcaciones y fondeos irregulares.
En las últimas semanas, se han celebrado reuniones entre el Consell de Formentera y distintas administraciones para avanzar en un marco común de actuación que permita sancionar de forma más efectiva estas prácticas ilegales y minimizar su impacto en el ecosistema.
La zona, incluida en la red Natura 2000, ha sido objeto de restricciones progresivas en los últimos años, con la creación de un sistema de fondeo regulado y cupos limitados para embarcaciones.
