Pedro Sánchez reapareció este lunes en el Telediario 2 de TVE con una entrevista conducida por Pepa Bueno, que regresó al aire luego de 13 años. Es la primera vez que el mandatario de España se sienta en un plató tras el parón veraniego y lo hizo con un telón de fondo complicado: las causas judiciales abiertas contra su hermano y su esposa, Begoña Gómez, y las informaciones que apuntan a supuestas irregularidades en el PSOE.
Sánchez señala que «hay jueces que hacen política»
Preguntado por los procesos judiciales que afectan a miembros de su familia, Sánchez fue contundente y denunció que en España existe una peligrosa mezcla entre política y justicia, afirmando que “hay jueces haciendo política y políticos haciendo justicia»: con esta fuerte afirmación hizo alusión que algunos procedimientos podrían estar guiados por intereses partidistas.
El presidente insistió en que las investigaciones contra su entorno familiar se basan en “denuncias falsas” y en “recortes de prensa de organizaciones ultraderechistas” que, según él, buscan abrir causas judiciales sin fundamento. Para Sánchez, este tipo de prácticas afectan a las personas directamente implicadas, pero también «generan un inmenso daño a la confianza de la ciudadanía en el sistema judicial».
Durante el diálogo, amplió además su defensa al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, quien afronta un proceso por las supuestas filtraciones relacionadas con la investigación a la pareja de Isabel Díaz Ayuso. Sánchez fue tajante al señalar que “esa filtración no se ha podido probar” y recordó que uno de los magistrados del Tribunal Supremo emitió un voto particular en el que cuestionaba la solidez de la acusación: “No se puede abrir un juicio sin ninguna prueba”.
El Presidente niega una financiación irregular en el PSOE
Respecto a las acusaciones sobre irregularidades en la financiación del PSOE, el mandatario del Gobierno aseguró que «no existe ninguna trama de corrupción interna en el partido»; a su vez, remarcó que su manera de entender la política es «incompatible» con estas prácticas.
En ese sentido, recordó que cada ejercicio del partido pasa por dos filtros distintos: la revisión del Tribunal de Cuentas y una auditoría externa contratada por la propia dirección. Según argumentó Sánchez, «ninguno de esos informes detectó irregularidades».
