No, pero sí. No hay motivo para sancionar, pero si se producen los mismos hechos otra vez podrían ser «motivo de reprobación disciplinaria».
Este es el ambiguo resultado de la investigación interna de la Conselleria de Educación sobre la denuncia de una familia judía de un alumno menor de edad por antisemitismo a la profesora de inglés del Instituto de Educación Secundaria Sa Serra, Ángeles Roselló, hecho público hoy.
Inspección Educativa de la Conselleria de Educación no ha observado indicios de irregularidad, después de que la inspectora de referencia del centro haya entrevistado a todas las partes, en el comportamiento de la profesora y concejal de Unidas Podemos en el Ayuntamiento de Sant Antoni, quien había sido denunciada por la familia de un alumno judío por antisemitismo.
La Conselleria de Educación ha informado esta mañana de la finalización de la investigación de la inspectora cuyo informe ha sido avalado por el jefe de Inspección Educativa de la Conselleria de Educación y Universidades, sin que se hayan observado «indicios de irregularidades por parte de la dirección del centro ni de la misma profesora que puedan ser motivo de reprobación disciplinaria».
«Aún así -continua la nota- desde Inspección Educativa se hacen una serie de advertencias en cuanto a la relación y comentarios que se producen en el ámbito educativo y avisa que de repetirse una situación similar podría dar lugar a un falta disciplinaria tipificada».
Redes sociales
«Asimismo, se insta al centro educativo a incorporar en sus documentos institucionales algunas pautas en cuanto a la relación de los docentes y los alumnos vía redes sociales».
La denuncia del alumno reflejaba trato vejatorio, faltas de respeto, humillación frente a compañeros, maltrato psicológico y exclusión de índole racial por parte de Angie Rosselló.
La concejal, el claustro y la dirección del centro negaron los hechos denunciados y arremetieron contra los medios de comunicación por publicar la noticia.
En una entrevista publicada en La Voz de Ibiza, Maxo Benalal, secretario general de las Comunidades Judías de España, reclamó que la profesora fuera suspendida de forma cautelar.
