La situación de la sequía en las Islas Baleares sigue sin mejorar y Formentera entra en alerta por este contexto. Además, Ibiza ha sufrido una caída en sus reservas hídricas.
Según el comunicado del Govern, las reservas hídricas de Baleares han experimentado un ligero aumento en enero, pasando del 53% al 54%. Sin embargo, este incremento contrasta con las situaciones específicas de cada isla.
Mallorca registra un aumento del 54% al 56%, Menorca experimenta una reducción del 54% al 52%, mientras que Ibiza sufre una caída más pronunciada, pasando de 43% al 39%.
En términos de alerta por sequía, el 91,9% del territorio se encuentra en prealerta, destacando que solo Tramuntana Nord mantiene una situación de normalidad, abarcando el 8,1% del territorio.
Las unidades de demanda en Menorca, Artà, Manacor-Felanitx, Migjorn, Es Pla, Palma-Alcúdia, Tramuntana Nord, Tramuntana Sud e Ibiza se mantienen en prealerta, siendo Formentera la única en alerta, indicando un nivel más crítico en sus reservas de agua.
Las lluvias
A pesar de que en enero se registraron lluvias por encima de la media histórica en las Islas Baleares, con 66,8 l/m², Ibiza y Formentera recibieron menos precipitaciones de lo habitual, 12,5 l/m² y 18,6 l/m² respectivamente, quedando por debajo de sus medias históricas.
Este mes también se caracterizó por temperaturas más altas de lo esperado, con una media de 12,2 ºC, representando una anomalía de +1,7 ºC respecto a la norma.
