La portavoz de Vox en el Parlament, la rebelde Idoia Ribas, ha calificado este viernes como «punto de inflexión» la reconciliación del grupo parlamentario con la dirección del partido. Ahora comienza una nueva etapa para el partido, del cual ha adelantado que no tendrá solo la cuestión lingüística como prioridad.
El acuerdo y la reconstrucción de Vox «permitirá avanzar en los compromisos con la ciudadanía y en el acuerdo de gobierno con el PP«, ha señalado Ribas. «Estamos convencidos de que esta oportunidad supondrá dar estabilidad al Govern y posibilitará avances en los compromisos programáticos reflejados en los 110 puntos del acuerdo de gobernabilidad», añade.
El pasado jueves, minutos después el anuncio de que Vox estaba nuevamente unido en Baleares, la portavoz no quiso dar declaraciones porque prefería «estudiar» las consecuencias del regreso de Gabriel Le Senne, presiente del Parlament, y Patricia de Las Heras, presidenta regional de Vox Baleares, al partido político.