Carlos Alcaraz no solo volvió a brillar en el césped londinense de Queen’s, donde conquistó su segundo título consecutivo en el torneo. El tenista murciano ha encadenado una impresionante racha de 18 victorias seguidas, pero el verdadero punto de inflexión, según él mismo reconoce, estuvo lejos de la pista… y muy cerca de las aguas de Ibiza.
“Los días en Ibiza me ayudaron a sentirme como una persona normal, disfrutando con amigos y familia”, explicó el número 2 del mundo en rueda de prensa tras alzar el trofeo en Londres.
El descanso en la isla sirvió como reseteo mental y físico tras un inicio de temporada irregular, marcado por resultados discretos y críticas constantes tras el estreno de su documental.
Vacaciones en Ibiza antes de su mejor momento
Alcaraz decidió parar tras una derrota en Miami frente al veterano David Goffin. Acusaba un bajón anímico y una fatiga acumulada, tanto física como mediática.
Las redes le acusaban de “falta de profesionalidad” por tomarse unos días de descanso. Pero él apostó por lo contrario: silencio, desconexión y tiempo con los suyos en Cancún y luego en Ibiza, donde disfrutó sin raqueta y alejado del foco.
“Tuve mucho hate después de mi derrota en Miami. Mucha gente preguntándose por qué me iba de vacaciones con mi familia después de aquella derrota. Y esa escapada fue clave. Estar con mi familia, no tocar la raqueta durante seis días. Después de esos días volví a disfrutar jugando al tenis», aseguró en rueda de prensa.
“Soy un tenista que necesita desconectar de vez en cuando. Pasar tiempo en la isla fue fundamental para volver a sentirme con ganas, con hambre de competir”, explicó.
La decisión, lejos de frenar su progresión, fue el comienzo de una racha histórica: cuatro títulos (Montecarlo, Roma, Roland Garros y Queen’s) y solo una derrota.
Críticas frente al “modelo Big 3”
Desde algunos sectores se ha exigido a Alcaraz imitar el ritmo implacable de Nadal, Federer o Djokovic. Sin embargo, el joven murciano reivindica un modelo diferente, más sostenible: “No todo es jugar y competir. A veces hay que cuidarse también por dentro”, dijo.
Su estancia en Ibiza, un destino que conoce bien y al que suele regresar, ha demostrado ser algo más que ocio: ha sido una herramienta estratégica en su preparación.
Preparado para Wimbledon… desde la playa
Con 27 victorias en sus primeros 30 partidos sobre hierba —una cifra que supera incluso a leyendas como Federer o Sampras en sus inicios—, Alcaraz ya se perfila como uno de los grandes favoritos en Wimbledon, torneo que ganó en 2023 y 2024. Esta vez, tras recargar energías en la isla, apunta a un tercer título.
El tenista se quedará en Londres en los próximos días para completar su preparación, aunque ya ha dejado claro que Ibiza tiene un sitio reservado en su agenda. Quizá no sea solo una escapada: podría ser la clave de su fórmula para el éxito.
