El precio de la vivienda de segunda mano en Baleares continúa marcando máximos históricos. Según los últimos datos publicados por Fotocasa, el valor medio del metro cuadrado en noviembre se situó en 5.206 euros/m², lo que supone una subida del 0,2% respecto a octubre y un fuerte incremento del 14,8% en comparación con noviembre de 2024.
Esta escalada se traduce en que una vivienda estándar de 80 metros cuadrados cuesta ahora de media 416.491 euros en las islas, un importe que consolida a Baleares como uno de los mercados inmobiliarios más tensionados del país.
Subidas en 16 de los 17 municipios analizados
El incremento de precios se extiende prácticamente por toda la comunidad. Fotocasa señala que 16 de los 17 municipios analizados registran aumentos interanuales, algunos de ellos especialmente intensos.
Siete localidades superan el 20% de encarecimiento en solo un año:
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Inca: +42,9%
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Manacor: +34,1%
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Campos: +31,9%
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Sant Josep de sa Talaia: +22,7%
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Son Servera: +22,5%
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Ciutadella de Menorca: +22,3%
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Felanitx: +21,8%
La única excepción a la tendencia alcista es Alcúdia, que registra una caída del 1,6% interanual.
Ibiza y Santa Eulària, entre las zonas más caras de España
En cuanto al precio absoluto del metro cuadrado, varias localidades de las Pitiusas y Mallorca superan ampliamente la barrera de los 6.000 euros/m², situándose entre las más caras del país.
Las cifras más elevadas corresponden a:
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Santa Eulària des Riu: 8.666 €/m²
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Ibiza: 7.553 €/m²
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Sant Josep de sa Talaia: 7.392 €/m²
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Andratx: 7.291 €/m²
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Sant Antoni de Portmany: 7.054 €/m²
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Campos: 6.823 €/m²
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Calvià: 6.594 €/m²
Estas zonas consolidan su posición como algunas del mercado inmobiliario más exigente de España, impulsadas por la alta demanda, la escasez de suelo y el interés sostenido del comprador internacional.
Un incremento sostenido que tensiona el acceso a la vivienda
Los datos reflejan la tendencia al alza de los últimos años y vuelven a poner de manifiesto las dificultades de acceso a la vivienda para residentes y trabajadores, especialmente en Ibiza y Mallorca, donde los precios superan con creces la capacidad adquisitiva media.
El sector inmobiliario atribuye esta dinámica a la combinación de escasez de oferta, presión turística, interés extranjero, y falta de vivienda asequible, factores que continúan empujando los precios hacia máximos.
