Un año de la crisis en el Consell de Formentera, su presidente, Llorenç Córdoba, habla en esta entrevista exclusiva con La Voz de Ibiza. Esta es la segunda parte de la entrevista en la que se pronuncia sobre diferentes aristas de la situación inédita que se vive en la pitiusa menor.
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La investigación de la UCO y las sospechas de corrupción sistemática entre funcionarios, políticos y empresarios
–¿Qué novedades hay de la investigación de la UCO, si hay alguna que se pueda contar?
–No muchas. Seguramente siguen investigando.
–¿Llegan al Consell de Formentera solicitudes de documentación o alguna petición oficial?
–No.
–¿Han tomado declaración a nuevos testigos o investigados?
–Que yo sepa no. Por lo que sé, al menos tres personas han declarado: la señora Verónica Castelló, que estuvo cerca de tres horas, según dijo ella misma; la señora Cristina Costa, y también el señor secretario.
–¿A usted no le han tomado declaración?
–No.
–¿Tiene conocimiento de que hayan tomado declaración a más personas?
–Me han dicho que sí. Lo que no sé es quiénes son.
–¿Funcionarios?
–No lo sé. Lo que le dije a la Fiscalía Anticorrupción es que las puertas del Consell de Formentera están abiertas. Que pidan lo que necesiten y se lo facilitaremos.
–De alguna manera, interpreto su rueda de prensa en la que desveló los detalles de su denuncia como una denuncia a una corrupción sistémica en el Consell de Formentera, que implicaría al PSOE, Gent per Formentera y Sa Unió, además de una clara participación de funcionarios y determinados empresarios.
–Los indicios y sospechas apuntan en esa dirección. Yo siempre lo he dicho, y me sabe mal porque es algo muy serio, y yo no puedo ni quiero hacer de juez. Pero mi obligación es que, cuando veo una serie de actuaciones en las que creo que puede haber indicios de delitos, es ponerlo en conocimiento de a quien corresponde investigar. Parece que los indicios lo confirman.
–¿Esa supuesta corrupción sistémica estaría detrás de la presión para echarle o que se vaya?
–Personalmente, he llegado a esa conclusión. Creo que sí, porque no entiendo ciertas cosas si no es desde este punto de vista, ni determinados cambios de actitud. La oposición, cuando Sa Unió intentó echarme sin pruebas, se comportó de forma institucional y respetuosa.
En el momento en que se tocó el tema de los quioscos, cambió completamente la actitud de la oposición. Ahí pensé: «Esto no lo veo claro».
Tengo indicios de cosas que quizás no se han hecho bien. No quiero decir que sea corrupción ni algo tan grave, pero sí que hay cosas que no se han hecho correctamente.
Después de eso, ocurrió que tanto Gent per Formentera como el PSOE se unieron y ahora mismo los tres partidos van juntos.
–Todo esto es muy curioso en Formentera.
–La complicidad que hay entre Alcaraz y el señor (Rafa) Ramírez (secretario general del PSOE de Formentera) es más que evidente. Ambos están maniobrando a espaldas de sus propios partidos.
Código Ético
–¿A qué se refiere?
–¿Por qué están poniendo tanto interés en el Código Ético? Porque, al no tener nada concreto un año después, necesitan fabricar algo o encontrar una excusa para justificar una moción de censura. Porque ahora mismo nadie entendería que hubiera una moción de censura.
Si la hubiera, lo más lógico es que fuera de Gent per Formentera, que son los que tienen una posición más moderada y están demostrando ser más inteligentes. No creo que les interese políticamente en estos momentos.
Si no hubiera un interés por la silla, Compromís no se habría boicoteado la moción de censura que intentó GxF.
–Sería relativamente fácil y de escaso coste político que el PSOE o GxF cedieran un conseller o uno cada uno para asumir el coste entre los dos, para que sa Sa Unió presente la moción de censura y después se abstuvieran…
–Un gobierno en minoría de Sa Unió no lo quiere Gent per Formentera. Ahora mismo, a Gent per Formentera no le interesa gobernar cuando tiene prácticamente asegurada la victoria en las próximas elecciones. No les conviene. No digo que lo hagan con mayoría absoluta, pero con un poco de suerte podrían gobernar con el PSOE. Prefieren dejar que todo el desgaste recaiga en el centro-derecha.
El relato y tiene cierto fundamento es que el centro-derecha cuando ha tenido la ocasión de gestionar el Consell lo ha hecho muy mal.
Prácticas mafiosas de Alcaraz y Serra: “Se han traspasado todos los límites”
–¿Qué opina de que Alcaraz y Javier Serra fueran al jefe de personal del Hospital de Formentera para pedir que despidieran a una sanitaria por apoyarlo en redes sociales?
–Lo que he visto con esta crisis es que se han traspasado los límites de la política para entrar en temas personales. Esto demuestra dos cosas: cómo eres como persona y que políticamente no tienes nada sólido.
Al principio de esta crisis, estaban llamando a amigos míos de la infancia para preguntar si tenía algo sucio, si había hecho algo mal. Tengo pruebas y me lo han confirmado. Se ha jugado muy, muy sucio a nivel personal. Y ya se ve que no ha sido algo puntual, sino algo extendido.
Es el modus operandi que tienen. El señor Alcaraz agredió físicamente al jefe de prensa del Consell. Me sorprendió que no haya salido nadie y que el resto de medios no lo haya publicado. Estaban allí delante y no dijeron nada.
¿Quién dice que estas mismas prácticas no las esté llevando a cabo Alcaraz contra sus propios consellers? Porque se sabe que ha habido amenazas hacia los propios consellers para que no regresen y no se pueda hacer una Junta de Gobierno.
La querella que nadie ha visto y la reunión con el encapuchado
–¿Se cree que Sa Unió le haya interpuesto una querella?
–Sí. Que tengan algún fundamento, no. A veces me dicen que es por las hamacas, luego me dicen que es por los quioscos. Yo, en el tema de los quioscos, no he participado; me he apartado. Y, en las hamacas, mientras he estado, se han adjudicado, si no me equivoco, cuatro lotes de hamacas, que quedaron desiertos, y una escuela de vela. Todo con informes técnicos favorables.
Esas adjudicaciones fueron por Junta de Gobierno.
–¿De qué trató la reunión con el supuesto encapuchado?
–No era un encapuchado. Ese día llovía y esa persona entró en el Consell con la capucha puesta. «¿Y si hubiera entrado con un paraguas, habrían dicho que iba con una arma blanca?». Luego se la quitó. Todo el mundo lo reconoció.
–¿De qué trataron en la reunión?
–Fue una reunión política, ese encapuchado, ya había tenido reuniones con Sa Unió. Su propósito era aportar más información a los consellers que debían tomar una decisión sobre los chiringuitos porque parecía que no entendían mi punto de vista y que era contrario a que se adjudicaran por el elevado riesgo patrimonial que corre el Consell.
–¿Entonces fue una reunión por los ocho lotes de chiringuitos que faltaban?
–No, se habló más de hamacas que de chiringuitos.
–¿Pero ya estaban todas los lotes de hamacas adjudicados?
–Sí, pero al igual que pasa con los chiringuitos, había muchos que no cumplen. Y aquí hay un problema muy grave porque este pliego de condiciones tiene un riesgo muy, muy, muy grande de ser anulado. Si se anula este pliego de condiciones, Formentera tendrá que pagar indemnizaciones. Lo que había que hacer era tratar de que el coste para el Consell sea lo mínimo posible.
–¿De qué coste estamos hablando?
–No lo tengo calculado.
–¿Millones?
–Sí, sí. El coste sería por 50 lotes, dentro de los cuales hay 8 chiringuitos que tienen una facturación alta. El lucro cesante de esos 50 lotes durante 6 o 7 años puede ser una cifra enorme.
Yo por eso intentaba que no se adjudicaran los ocho chiringuitos, los lotes más caros. Sa Unió quiso adjudicarlos a toda costa. Si hay que pagar indemnizaciones, será su responsabilidad. Estaban más que avisados.
–Volviendo al encapuchado, ¿qué pasó en aquella reunión?
–Nada especial. Estaban el señor Portas, la señora Castelló, y la señora Cristina Costa, por teléfono. Esta persona explicó cómo veía el concurso. No hubo nada más. La sorpresa fue cuando, por la tarde, salió Sa Unió diciendo que «Llorenç ha hecho una encerrona y ha traído a un encapuchado». Y yo pensé, «¡Ostras! Pero ¿qué historia es esta?».
–Pues parece que le han acusado de cohecho, prevaricación, malversación de fondos…
–Me parece increíble pensar que haya podido cometer tantos delitos en tan poco tiempo, sinceramente. No lo entiendo. Supongo que tendrán que demostrarlo con pruebas, pero no entiendo por dónde va. Porque cuando me dijeron que era por esa reunión, pensé: «No, esto será para engañarme, será por otra cosa.»
Sinceramente, tengo muchas ganas de que esto salga a la luz para saber qué ha pasado realmente allí.
–¿Ha tenido alguna actuación judicial relacionada con esta supuesta querella?
–No, no, nadie me ha llamado, ni me han dicho nada, ni nadie me ha comunicado nada.
–¿No ha recibido ninguna notificación?
–Nada.
–En cuanto al concurso bajo sospecha, ¿por qué no lleva a Pleno la decisión de rescindir las adjudicaciones, considerando las flagrantes y continuas irregularidades en los quioscos y otros concesionarios, dado que los pliegos están mal hechos y son imposibles de cumplir?
–Ahora se está trabajando en ello. Se han hecho reuniones, no para ir en contra de los quiosqueros, sino para buscar soluciones. Incluso se les ha otorgado una prórroga para que puedan terminar de presentar toda la documentación necesaria, porque, hasta ahora, nadie cumple con los requisitos. Cuando termine este plazo para entregar los documentos, desde la Conselleria se abrirán los expedientes pertinentes y se aplicarán las sanciones que correspondan. Hay algunos casos que directamente supondrá la rescisión de contrato. De lo contrario, sería injusto para los demás. Esto es un fraude. Es un fraude continuado, y es algo que ya había hablado con mis funcionarios. Ellos me decían que no, que todo estaba correcto. Y ahora resulta que no era correcto.
Por ejemplo, la escuela de vela que no tenía autorización del Govern Balear. Yo tampoco lo sabía, y lo considero muy grave que haya estado funcionando sin autorización del Govern balear.
–¿Ha aparecido el archivo Excel con las puntuaciones?
–Que yo sepa, no ha aparecido.
–¿Le sorprende?
–Sí, me sorprende mucho. Aquí ya no debería sorprender nada, pero cuando parece que lo has visto todo, siempre aparece algo nuevo. Sería bueno que apareciera. Es un archivo que tiene información importante. Debería estar en algún ordenador. Habrá que investigar en qué ordenador estaba, quién lo manejaba y dónde puede estar. Pero cualquier información que realices relacionada con alguien debe estar en un expediente.
Por otro lado, una puntuación de lotes de playa, hay que justificar de dónde sale. No basta con calcular los números. Hay que demostrar cómo se hizo esa puntuación.
Entonces, es muy grave que, al pedir ese Excel para verificar qué había pasado, si había algún error o una equivocación de transcripción desde que se puntuó hasta que se trasladó a otro lugar, resulte que ese Excel no esté.
Cuando empiezan a desaparecer documentos… Primero en Urbanismo, y ahora aquí. Todo va en la misma línea: evidencias de que hay cosas que no están claras. Y cuando intentas averiguar si realmente no están claras o si es paranoia, resulta que efectivamente no está claro.